Crítica de cine: Los Juegos del Hambre.

Ayer tuve la oportunidad de ir al cine, y poder ver Los Juegos del Hambre, basada en la novela homónima de Suzanne Collins.

Yo me he leído la trilogía de novelas cuya primera entrega es ésta. En el siguiente post realizaré la crítica de estos libros, pero antes una breve sinopsis:

En un futuro distópico, la nación de Panem se alza sobre el territorio de los que fue los Estados Unidos. Está dividida en 12 distritos, dirigidos por el tiránico gobierno del Capitolio. Tras una rebelión, el Capitolio exige que cada distrito entregue a un chico y una chica de entre 12 y 18 años elegidos por sorteo para que se enfrenten en un combate a muerte televisado en el que sólo puede haber un vencedor, Los Juegos del Hambre.  

Una joven de 16 años del distrito 12, Katniss Everdeen, se presenta voluntaria al salir su hermana pequeña en el sorteo. Y se dirige al Capitolio para una lucha letal..... 

La película, dirigida por Gary Ross, es buena. No excepcional, pero contiene elementos que la hacen destacar de entre los productos fílmicos destinados al público adolescente. Así que cualquier comparación con otras sagas, como la de Harry Potter o Crepúsculo, es injusta.

Ross, autor de la fantástica, maravillosa Pleasantville, ha optado en ese film por una dirección con cámara en mano y abundantes primeros planos, cuyo resultado es una implicación emocional con los personajes. También obvia la violencia extrema que presenta el libro: uno, por exigencias comerciales, ya que la pelicula tiene que ser calificada apta para los menores; y dos, no resulta agradable ver a niños matándose entre si en la pantalla. Ya las pocas escenas de violencia mostradas son impactantes por sí mismas. 

La apuesta del realizador por los primeros planos y la empatía por los personajes no serviría de nada si no contará con excelentes intérpretes. Exprime al máximo los minutos dados a Stanley Tucci, Donald Sutherland, incluso al cantante Lenny Kravitz. 

Pero la actuación deslumbrante recae en esa estrella en ciernes, y en esta película confirmada, Jennifer Lawrence. Su capacidad interpretativa estaba fuera de toda duda después de Winter's Bone, pero aquí está soberbia. Refleja de forma exacta el personaje de Katniss Everdeen escrito por Collins. Y es una tareae difícil: arisca, contenida, dura, con una enorme capacidad de lucha y sacrificio, requiere una interpretación sobria que logre transmitir sus sentimientos y sensaciones mediante pequeños detalles, y no grandes aspavientos o muecas. Es tan buena actriz que se te olvida de lo bellísima que es, a pesar de que las circunstancias de la cinta impidan admirar esta faceta en toda su extensión.

A destacar dos apartados técnicos: la dirección artística(la caracterización del Distrito 12, el Capitolio, etc) y la música de James Newton Howard. Incluso en la falta de música en algunas escenas es destacable.

Para finalizar, esta es una cinta muy recomendable. Sus 142 minutos pasan en un suspiro.  No hay que dejarse arrastrar por los perjuicios de que es una película para adolescente, porque realmente merece la pena ir a verla. Y tanto. Ha sido número uno en la taquilla americana cuatro semanas seguidas y ya ha recaudado 531 millones de dolares en todo el mundo.