Este fin de semana tuve la oportunidad de ver una película estrenada hace unos meses llamada Invasión a la Tierra. La recordaba porque se exhibió a la vez que otra cinta, Skyline, sobre el mismo tema: el ataque conquistador de perversos alienigenas. Y las críticas indicaban la mayor calidad de Invasión a la Tierra.
Y lo cierto es que la película me ha impresionado gratamente. Aunque se desarrolla en el marco de la típica agresión procedente del espacio exterior, el argumento se centra en la lucha de un escuadrón de marines para rescatar y llevar a lugar seguro un grupo de civiles.
Lo positivo es que el guión no pretende dar lecciones sobre las virtudes de la humanidad en situaciones de riesgo, o cualquier tópico de estos films. Aquí sólo se pretende dar un espectáculo de acción bélica de principio o fin. Y vaya si lo consiguen. Desde el minuto uno.
Puede que los efectos especiales y el diseño de producción no sean de los mejores, pero lo compensa ampliamente con una vibrante dirección, con tiroteos y explosiones que no te desorientan, y unos actores correctos, sobre todo el protagonista, Aaron Eckhart, del que pudimos contemplar sus dotes interpretativas en Gracias por fumar.
Así, que si alguien quiere pasar un buen rato entretenido con una excelente cinta de acción sin pretensiones, este título es una buena reciomendación.
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